El presidente de la República, Iván Duque, afirmó que Colombia al asumir desde hoy la presidencia de la CAN, impulsará la Integración de los países de la región y abrirá las puertas para el retorno de Venezuela, a través de Juan Guaidó

Queridos Presidentes, hoy es un día muy especial.

Estamos en la Quinta de Bolívar, en la ciudad de Bogotá. En esta Quinta que fue habitada por nuestro Libertador, el verdadero, genuino artífice del bolivarianismo, quien defendió la integración de las naciones, quién defendió un sueño común de trabajo en equipo que estuviera solidificado en principios férreos e indeclinables.

Hoy se conmemoran 51 años de la existencia de la Comunidad Andina de Naciones. Una institución que interpreta ese sueño embrionario del verdadero bolivarianismo.

Una institución que a través de los años se ha fortalecido y, que hoy, al asumir Colombia la Presidencia pro témpore, lo hace con miras a llevar esta institucionalidad a un nuevo puerto de destino, más fuerte, más integrada, más moderna y que defiende ante todo el multilateralismo y el trabajo para que entre las naciones la armonía de nuestras normas se traduzca en oportunidades para todos.

Fue en esta Quinta recibida por el Libertador en 1820, donde él planteaba importantes pasos para el futuro del continente. Ya había librado, el Libertador, las batallas de Carabobo y las batallas de Boyacá y el Pantano de Vargas.

En esas etapas, el Libertador miraba el camino de llegar al Ecuador en lo que después sería el triunfo de Los héroes de Pichincha y la entrada triunfal a Quito. Y después, el encuentro con San Martín y las campañas del alto Perú, donde recordamos las glorias de Junín y Ayacucho.

En ese proceso de heroísmo, en ese proceso de batallas frente a las adversidades salió a relucir la verdadera esencia bolivariana que ya tenía sus raíces en importantes proclamas. En el manifiesto de Cartagena, en la carta de Jamaica y, después, en el bello discurso de Angostura en febrero de 1819.

Ese sueño, es un sueño genuino. Es el sueño de que entre nuestras naciones debe primar el interés común, el beneficio al más necesitado y, por supuesto, también, cimentado en el concepto de la libre empresa, del comercio. Y, claro está, en la democratización de oportunidades para los más vulnerables.

Ese es el verdadero pensamiento Bolivariano. No el que trataron de convertir en propaganda intérpretes interesados en desvirtuar el discurso Bolivariano para construir, sobre él, el ascenso de las dictaduras que arruinaron comunidades enteras, como lo hemos visto en la hermana República de Venezuela durante tantos años.

Fueron esos estafetas qué desvirtuaron el verdadero bolivarianismo. Los que trataron de generar la perpetuación de intereses mezquinos en el ejercicio del poder.

Pero hoy, la Comunidad Andina de Naciones (CAN) quiere revivir el verdadero y auténtico sentimiento de la integración, el verdadero sueño Bolivariano.

Y me alegra que hoy esté como invitado especial en este encuentro el Presidente (Juan) Guaidó, reconocido por más de 50 naciones del mundo en un esfuerzo, también, multilateral que ha sido planteado desde el Grupo de Lima, Presidente (de Perú, Martín) Vizcarra, donde agradecemos su liderazgo, que ha sido defendido, también, con la voz férrea de nuestro buen amigo Lenin Moreno, y que, también, se hace grande con las convicciones que le ha planteado al mundo la Presidenta (interina de Bolivia, Jeanine) Añez, para construir un verdadero camino democrático en su nación.

Los retos de la Comunidad Andina

Hoy reconocemos que nuestro reto en la Comunidad Andina es más grande que nunca. Hoy queremos que sea el ciudadano andino el eje central de la integración y que la pueda vivir con la libre movilidad, que la pueda vivir con tarifas unificadas de roaming, que lo pueda vivir con la unificación de criterios para el registro, desarrollo y expansión del espíritu empresarial.

Que hoy lo pueda vivir, también, con el fortalecimiento de la institucionalidad comercial, quitándole tantas arandelas que podrían ser cada vez más fáciles para que el comercio fluya, y producto de ese comercio le demos más oportunidades a quienes apuestan por la micro, pequeña, mediana y gran empresa.

Hoy, también, queremos que ese ciudadano andino pueda ver construir una carta ambiental que sea abrazada por nuestros gobiernos, para que crezca el concepto de producir conservando y conservar produciendo, para que hagamos de reciclar, reducir y reutilizar, patrones, también, de un concepto de Economía Circular que sea sentido en cada rincón de nuestras naciones.

Hoy, también, queremos que esta comunidad andina le transmita al ciudadano andino las oportunidades de la cuarta revolución industrial, y que soñemos con que la coproducción, la co-creación, nuestra innovación entre naciones nos distinga frente al mundo.

No tengo duda de que será el paradigma nuestro que tengamos herramientas de integración más efectivas, que llevemos a la universidad Simón Bolívar a convertirse en un hito de la educación virtual, y que se una con programas de las más destacadas universidades del mundo.

No tengo duda de que será esta comunidad andina la que nos permitirá fortalecer los canales de turismo y de movilidad. Y no tengo duda de que será esta comunidad andina la que seguirá defendiendo los bríos de la democracia y de la institucionalidad.

Por eso, la presencia hoy del Presidente Guaidó es, también, para decirle que lo recibimos con gusto de nuevo en esta comunidad. Comunidad que intentó ser fracturada por el chavismo y los neo chavistas que quisieron debilitarla para darle curso a proyectos de integración al servicio de sus intereses opresores y antidemocráticos.

Hoy nos complace que, también, reafirmamos el sentimiento de apoyar indeclinablemente el proceso que debe asumir Venezuela, el fin de la dictadura, la construcción de un gobierno de transición con amplia representación, la convocatoria de elecciones libres y la puesta en marcha de un proceso de activación económica.

Aquí estamos en un encuentro multilateral para validar esos sentimientos. Y para reiterarle al hermano pueblo de Venezuela que no está solo y que no ha estado solo, porque los países andinos aquí representados somos los que le hemos demostrado el mundo que, aún con restricciones fiscales y con restricciones sociales, no hemos tenido restricciones de afecto para darle la bienvenida a migrantes que han huido de la más opresora de las dictaduras que hay visto Latinoamérica en su historia reciente.

Hoy elevamos nuestra voz de integración, para que esos principios democráticos sigan construyéndose.

La pandemia del coronavirus

Pero hoy, también, levantamos nuestra voz en medio de una pandemia. De una pandemia que tiene efectos en la salud, efectos en el comercio, efectos en la demanda agregada mundial, efectos en el comercio, efecto en el debilitamiento de los términos de intercambio.

Pero que es, justamente, la integración, el camino para ventilar esas posibilidades comunes para enfrentarla y para salir adelante.

Hemos tenido que afrontar la dificultad para conseguir insumos para atender pacientes críticos, pero los hemos solventado y hemos aprendido de nuestras experiencias. Hemos tenido que sortear las súbitas parálisis de sectores generadores de empleos y tratar de buscar vehículos de asocio, de insumo de atención y de subsidios prácticos.

Y también, entre todos, hemos asumido el reto de construir vehículos genuinos, necesarios, oportunos, para proteger a los más vulnerables.

Es justamente en estos momentos donde tenemos que acelerar nuestra historia, fortalecer la virtualidad, fortalecer la telemedicina, fortalecer la inclusión financiera, fortalecer los servicios, que puedan unir las cadenas de abastecimiento con las compras directas de los ciudadanos mientras se protege la salud y la vida.

Pero que sea, también, está la oportunidad para que en el seno de esta comunidad entendamos que el camino más importante es la reactivación económica con esa responsabilidad con la vida y la salud. Porque los demagogos han tratado de sembrar en nuestros países la idea de que son incompatibles la protección de la vida y la salud con el desarrollo económico y social.

Vaya si se equivocan. Porque si no hay buena salud no tenemos desarrollo económico y social. Pero si no tenemos desarrollo económico y social tampoco tendremos buena salud. Por eso, aquí no hay alternativa porque esta pandemia estará más larga de lo que todos quisiéramos.

No hay vacuna. No hay tratamiento. Pero lo que si hay es una sociedad que quiere con su disciplina, con su tesón, con la autoprotección, con el distanciamiento físico, con los usos del tapabocas, con la protección de los más vulnerables, demostrarse a sí misma y de mostrarle al mundo que si hay caminos de recuperación de manera responsable para que no se pierdan empleos y para que podamos proteger las conquistas sociales alcanzadas en las últimas décadas.

Por eso la invitación, también, en esta Presidencia pro tempore, es que sigamos identificando las medidas necesarias para coordinarnos, para coordinar el restablecimiento oportuno de transporte aéreo, del transporte de pasajeros. Para que aprendamos, también, de nuestras experiencias, de los cercos epidemiológicos. Para que aprendamos, también, de las medidas para identificar, rastrear y aislar pacientes contagiados.

Que asumamos, además, el aprendizaje de nuestras experiencias en materia de reactivación. Pero que miremos siempre con ese horizonte de integración, que es en nuestras cadenas de valor y en el comercio intrarregional como, también, responderemos a las necesidades de los ciudadanos.

Colombia es uno de los países que más comercia con estas naciones al interior de la comunidad andina. La comunidad andina juega un papel importante como socio comercial de nuestro país.

Pero queremos fortalecerla para que sean oportunidades que se sientan en Guayaquil, en Quito, en muchas regiones del Ecuador, que se sientan en Oruro, que se sientan en La Paz, que se sientan en Pucallpa, que se sientan en Lima, que se sientan desde La Guajira hasta el sur occidente de Colombia. Y, que se sientan, también, en la construcción de un nuevo futuro para que cuando reverdezca la democracia en Venezuela, también, esté presente allí la oportunidad para los ciudadanos de esa hermana nación.

Queridos presidentes, asumimos esta Presidencia Pro tempore con una agenda clara para contribuir a dinamizar nuestra Comunidad Andina. Apoyaremos la gestión de nuestro compatriota Jorge Hernando Pedraza para seguir dando los pasos en materia de integración comercial conectividad, libre movilidad y oportunidades, y, por supuesto, en la formación de nuestra carta Ambiental Andina.

Pero no quiero terminar mis palabras sin, también, mencionar la importancia de la integración con Mercosur desde el punto de vista de facilitar el flujo de mercancías.

Y no quiero terminar sin hacer un llamado. Estamos en momentos donde todos enfrentamos la pandemia, donde todos buscamos los caminos de activación, donde todos buscamos los caminos de oportunidades genuinas para nuestros ciudadanos andinos. Pero sabemos, también, que en estos momentos de pandemia no falta los corre ve y diles y los estafetas del neo chavismo que quieren en nuestras naciones salir a sembrar el caos y cabalgar sobre el discurso del caos a sus nefastas pretensiones para acceder al poder.

Muchos de los países han visto ese discurso, el discurso de la destrucción. Han visto el discurso del insulto, del agravio, de enmasillar el nombre de otros, de aprovecharse de las noticias falsas y, también, de sembrar veneno discursivo para que sea el odio el que lleve los destinos de nuestros países.

Hoy más que nunca rechazamos ese espíritu de la destrucción casi apología del delito y que, adicionalmente, busca fracturar el espíritu de la integración y del libre desarrollo de la empresa como función social.

Invitación a la unidad

Hoy nuestra tarea es la de invitar a la unidad, porque en tiempos de pandemia solamente la mezquindad puede pretender romper los equilibrios de nuestras naciones para salir adelante juntas.

Hoy, más que nunca, tenemos que invitar a nuestra sociedades a entender –como lo diría el Papa Francisco– que aquí nadie se salva solo y que estamos todo enfrentando la adversidad con un criterio sublime, y es el de que dejemos a un lado cualquier sentimiento de derrota, y que dejemos a un lado cualquier sentimiento que use la exaverbación de sentimientos sociales.

Hoy tenemos que ser más solidarios que nunca. Hoy tenemos que ser más generosos que nunca. Hoy tenemos que ser más responsables que nunca. Y hoy tenemos que ser, más que nunca, defensores de los valores democráticos.

Por eso en este encuentro de la Comunidad Andina de Naciones, en esta casa del libertador, defendemos el genuino bolivarianismo. Ese bolivarianismo que hace 51 años, en el Acuerdo de Cartagena, nos llevó a conformar este espíritu de integración. Y que vendrán 50 años más. Y que esperamos que lleguen, también, nuevos países como observadores.

Hoy la presencia del Presidente Guaidó es una ilusión que se hará realidad para el regreso de Venezuela. Y esperamos también que nos acompañe Chile como observador y como miembro. Que pueda, también, retomar su participación. Toda vez que, también, al interior de esta comunidad somos varios los que estamos presentes en la Alianza del Pacifico.

Un propósito de integración común. De ideales comunes. De defensa irrestricta de la democracia. De la libre empresa. Pero de la protección del más vulnerable, del acceso a oportunidades. Esa es la verdadera integración.

La misma que no se amaina y que no se arredra en las adversidades. La misma que permitió el cruce de nuestros libertadores en jornadas invernales complejas en los llanos. La que permitió cruzar el Páramo de Pisba. La que permitió las campañas del Alto Perú. La que se hizo victoriosa en Pichincha. Y la que permitió que esa Gran Colombia, como espíritu que llevamos todos en el corazón, se mantenga a través de los años.

Asumo la Presidencia pro tempore de la Comunidad Andina de Naciones (CAN) para seguir fortaleciendo la integración. La asumo porque en estos momentos, donde el mundo escucha discursos en contra del multilateralismo, vamos por más multilateralismo.

Cuando escuchamos a quienes quieren fracturar esta institucionalidad hoy le decimos que la vamos a solidificar. Así que en este año estaremos llevando a cabo un plan muy claro en materia comercial, agrícola, de comunicación, movilidad, tecnología. Pero, sobre todo, estaremos integrando un equipo para aprender de nuestras lecciones de cómo enfrentamos el covid-19.

Que viva siempre el sentimiento integracionista de la CAN. Que viva para modernizarse.

Que viva para que sean más nuestros ciudadanos que tengan el espíritu para reconocerse como andinos, que tengan el espíritu de reconocerse como parte del verdadero sueño bolivariano, del que nunca dejaremos que nos lo arrebaten quienes utilizaron su nombre para construir dictaduras.

Fue el Libertador quien le dio vida a esta República, quien supo contemplar la figura de la Presidencia y jamás, la de la monarquía.

Que supo, además, que era en las instituciones independientes, incluido el cuarto poder, que defendió en tantas de sus proclamas, lo que nos permite hacer sociedades más fuertes.

Conclusiones

Quiero agradecerle la presidencia pro tempore ejercida por la hermana República de Bolivia. Quiero, también, agradecerle a la Canciller (de Bolivia) Karen Longaric Rodríguez, su trabajo. Vimos un gran esfuerzo para avanzar en una agenda común, lo agradecemos profundamente, exaltamos su trabajo.

También quiero agradecerles a los presidentes que nos acompañaron hoy en este día tan importante. Al Presidente Lenín Moreno, al Presidente Vizcarra, agradecerle al Secretario de la CAN y agradecerle, también, al Presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, su presencia.

Se reafirma el compromiso con la integración. Se reafirma el compromiso con nuestra agenda Andina. Asumo esta Presidencia pro tempore con todo el compromiso de sacar la agenda que hemos planteado el día de hoy adelante, y también quiero hacer un especial agradecimiento a todos ustedes por el reconocimiento que se hace a la política de construir Paz con Legalidad en nuestro país.

Desde esta Quinta de Bolívar, desde la casa de nuestro Libertador, les envío un saludo fraterno y seguimos adelante fortaleciendo la institucionalidad Andina.

Que Dios los bendiga. Muchísimas, muchísimas gracias.